martes, 30 de septiembre de 2008

Sólo una lágrima




¿En qué nicho está lo que quedó?
No hallo ni rastro ni asomo ni indicio

Revuelvo en basurales
busco en los espejos
pregunto a las calles humilladas
a sus inciertos transeúntes

Solo encuentro una lágrima

Una sóla
una lágrima sola
que alguien llorará algún día


del Poemario Violenta piel: inédito




domingo, 28 de septiembre de 2008

Otra en ella





Mi mano reinventa perfiles
siluetas colinas simas
lo que esta pobre piel ofrece

Se desnuda por la noche
ajena
otra en ella
despierta a la memoria de tu mano
otea redescubre
desde el tacto impensado
de tu mano
mientras desabrocha el ansia
la lleva a latigar
la precipita
la vuelve vuelo

Mi mano resucita
la memoria de tu mano
desde las altas
dolorosas catedrales de tu ausencia











O


Mi mano reinventa perfiles
siluetas colinas simas
lo que esta pobre piel ofrece

Se desnuda por la noche
ajena
otra en ella
despierta a la memoria de tu mano
otea redescubre
desde el tacto impensado
de tu mano
mientras desabrocha el ansia
la lleva a latigar
la precipita
la vuelve vuelo

Mi mano resucita
la memoria de tu mano
desde las altas
dolorosas catedrales de tu ausencia











miércoles, 3 de septiembre de 2008

“Chicas malas”

Fuimos las chicas malas
Asustamos a vecinos
escandalizamos a señoras
de misal y rosario


Siempre de negro
diluidas entre sombras
y desapareciendo en los espejos

Tomábamos coñac
en tardes clandestinas
mientras el jazz
nos cubría
para escurrirse luego
por los poros

Disfrutábamos la hierba
ocasionalmente
sin compulsiones
cuando queríamos
abrir los ventanales del cielo
y mirar trasnochadamente lo que hubiese

Nacimos despidiendo guerras
vivimos Viet Nam
un acto obsceno
y en la piel
el dolor de Hiroshima
y Nagasaki

Nos desvelamos con Sartre
Pero fue Simone quien ayudó
a hilvanar nuestra protesta


Consideramos a los Beatles
un tanto pueriles
era Piaff
quien nos alimentaba


Trenzamos flores
guirnaldas
pero fuimos suspicaces
con las exportaciones del Norte

Nunca pensamos
que seríamos reinas
Sí quisimos con el Che
ser compañeras


Compartimos cuerpo y alma
sin pedir nada a cambio
La vida ha sido nuestro manifiesto
Encendimos lámparas
para apagar la angustia
de estar vivas

Vivimos tan
pero tan intensamente
que ningún dolor nos fue
ni nos podrá ser jamás ajeno

Fuimos las chicas malas
Olíamos a incienso
a pachulí
otras veces a menta fresca

Pero el olor
que nos acompañó
fue el de la melancolía


Fuimos las chicas malas
y aunque no lo confiese abiertamente
por el qué dirán
los hijos
los amigos sensatos
el perro
los parientes
seguimos y seguiremos siendo
chicas malas